martes, 25 de enero de 2011

Vaya fin de semana más...

...extenuante... gratificante... destructivo... asfixiante... divertido... completo... HELADO y CALORUSO al mismo tiempo.
Más allá de la tontería de explicar cada uno de estos estúpidos adjetivos, me voy a centrar en ponerle sensanciones a un fin de semana donde los hechos se quedaron en pastillas se los comparo con lo que trajeron consigo. Voy al lío que es tarde, está nevando, hace un frío que hasta los esquimales se plantean volver al Polo... y yo estoy muerto de sueño a las 20.00 de la tarde... y dispuesto a acostarme, pero tengo cosas que escribir... entre ellas mi quiniela personal para Los Oscars.
Sábado 
Edificio Principal de la NYFA
Ni recuerdo la hora a.m
Sí, iba a tirarme el rollo en plan "X-Files" pero no recuerdo la hora. La cuestión es que el día anterior conseguí que Brad me aprobara el rodaje del proyecto que, inicialmente, pretendía rodar en el interior de un dormitorio pero que, ante la imposibilidad de conseguir uno (como voy necesitando un productor por la madre del amor hermoso), así que cambié la contextualización a un aula de la escuela. Importante lo de que fuera un interior, por aquello de tenerlo todo controlado pensarás... pues mira, NO... porque hasta que no deje de soplar el viento procedente de aquel planeta helado que salía en la única e incomparable "The Empire Strikes Back" va dirigir en el exterior Rita la Cantaora y sus hermanas (dicho esto, en un par de fines de semanas ya verás donde estoy rodando porque lo de contradecirme para ser una de mis maravillosas virtudes).
 El caso es que conseguí el aula con la ayuda del doble de Sean William Scott que es un TA (Training Assistant o algo así: una encantadora persona que te ayuda en todo lo que puede, durante las clases y fuera de ellas... y no, no es ironía); tenía mi equipo formado por 
RAQUEL, un encanto procedente de Brasil a quien no se le puede poner mala cara y que está para lo que necesites. 
 Y GONCHU, quien esta vez ejerció de DP y que, visto el resultado, ha sacado una partida bestial al reto que le puse: rodar en interiores y sin focos...
 Y a ellos se le sumó SAM, IKEM (la grandeza entre mortales) y mi adorada mano derecha, HELL.
Delante de la cámara estaba KERRI (de quien he descubierto un sentido del humor que mezcla lo mejor de ambas partes del mundo), RAFAELA (el punto de diferencia dentro de una escuela de actores) y ANDREW.


De él ya os hablé y os dije el cariño que le estaba cogiendo... pues sí, tenía razón en todo lo que se me pasaba por la cabeza.
Sentadas las bases, al RODAJE:
Y dado que el proyecto consistía en rodar una escena en una serie de planos me encontré definitivamente a mi mismo... profesionalmente hablando... del lado personal hablaremos otro día... o no.
El caso es que llegar a un set, con una escena planificada, cortando acciones, determinando los beats (lo sé: puto capullo pedante de los cojones... que se le va a hacer; pero, por si te interesa, son esas pausas en un momento del plano donde se deja patente una intención o sensación del personaje) a los actores, poder involucrarme con ellos por un lado para tratar de sacar una sensación en cada toma de cada plano, la intensidad de cada momento, la tensión del pasar del tiempo... y bueno. Una hora y media más tarde, había rodado 8 planos, cubierto una escena con tres ambientes y tres personajes.
Y más allá del resultado, del que estoy sensiblemente más contento (sí, ya lo he montado en mi pequeño, pero grande a la vez, mac... mañana lo monto en la escuela y por la noche lo subiré a youtube), la sensación que me queda es que se pudo sacar de la gente (actores y equipo técnico) lo que se necesitaba, desde el principio hasta el final (gran serie!!), a la vez de transmitir el buen ambiente con el que se debe trabajar, sin perder ni un ápice de tensión ni dedicación y que todo el mundo crea en lo que está haciendo.
Es mucho tirarse al pisto pensar que esto es cosa mía... y obviamente NO es así... pero coño, yo sonrío pensando que en algo tuve que ver.
La cuestión que subyace es que me sentí de puta madre... con perdón por lo de madre.
¿Y después? Pues a comer con Kerri, Ikem, Andrew y Hell a un restaurante chino que nos enseñó esa actriz incomensurable que pone sensaciones delante de la cámara.
No, no... ¿y después?
 Pues a casa de TONY, a hacer de actor para Andrew en su proyecto, donde básicamente pasaba de tontear con Kerri a recibir una soberana paliza por parte del propio director (y en este caso también actor) del proyecto. Me tiré tantas veces al suelo que acabé muertito... y por cierto, lo de la paliza es figurado... pero literal...
 Y al día siguiente, pues a sufrir congelamiento en la punta de los pies en el rodaje del proyecto de Raquel y después con el de Gonchu...
Joder, cansa hasta escribirlo... así que mejor me paro aquí.
Por cierto, que se me olvidaba!! La cosa no empezó la mañana del sábado, el viernes por la tarde, tras recoger los equipos me fui con DOUG a hacer de actor también en su proyecto, aunque de éste no tengo foto.
Y por lo demás... al día siguiente casi 11 horas de clase... y hoy ya lo he notado porque en la única clase que he tenido hoy, 2 horas y media de Editing #3 casi destrozo un par de Mac a cabezazos... vamos, que Doug, sentado al lado mía y mi neuro no tenía ni fuerza para traducir... así que flechao para casa... previa compra de algo calentito para el cuerpo... a montar la escena... a escribir en este rincón... a acordarme de TOD@S... a echaros de menos... y a descansar... que ya es hora.
La semana que viene los making of... cortitos pero making al fin y al cabo.
Y mañana, mi opinión sobre los Oscars, aunque solo sea para que mis hermanos sepan cuál será mi apuesta este año que no podemos hacer la quiniela junto...
Por cierto, Jay, creo que todavía se te adeuda una porno, no?
Un besito... o dos...

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